domingo, 11 de enero de 2015

Eternidad



Tibia mirada iluminas el soñar,

deseando despertar tu alma dormida,

y llenarla de  ansiada eternidad.

Eres el fuego infinito de tibias montañas,

que seduces, que quemas.

                                           

Ángel  de vida,  beberé  tu esencia divina,

envolviendo el corazón latiente de tu ser,

sin hojas de otoños que han de caer.

 
Tu tibia sonrisa ilumina la ojiva piramidal

y me desvanezco fluyendo en ti
en las galopantes y sublimes noches,

mientras mis sedientas manos,

consumen el oleaje rítmico de tu cuerpo,

despertando el ocaso perdido del alma,

yaciendo contigo

en la efímera eternidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario