Déjate llevar por
el oleaje perdido,
en la espuma incandescente,
que emerge jadeando emociones.
¡Sin deseos!
¡Sin gloria!
Camina con
pisadas fuertes
Insistiendo…¡batallando!
en la tierra fraguada de olvidos
se agolpa el taciturno invierno
del ocaso.
Déjate llevar
por la cálida paz
sucumbiendo
ante el obelisco más alto,
de tu bello
mirar.
¡Emanas recuerdos vivos!
Siente la dicha que se aferra
resurgiendo a
celeridad,
con pasos profundos he de luchar
entre petirrojos
marchitos renacerás
más la siguiente estación …no volverá
mirada atada al vacio,
se mi llanto,
mi cobijo,
pero perecer…¡jamás!
No hay comentarios:
Publicar un comentario